Archivo de la categoría: Televisión

Monteseirín: claves de su carta del adiós

El aún alcalde de Sevilla envió el viernes, camino de Nápoles, una carta a los periódicos  de la ciudad con publicación embargada hasta el domingo para despedirse de los sevillanos y, de paso, lanzar una serie de mensajes codificados a su partido, que pretende que agote el mandato y permanezca en la Alcaldía hasta dentro de quince meses, cuando se celebren las elecciones municipales.

Insólito: el alcalde se despide sin haberse ido. La carta, titulada ‘Gracias a Sevilla (que me ha dado tanto..)’,  puede interpretarse como un órdago a la dirección del partido: aparentando una dimisión inminente, Monteseirín buscaría obtener garantías de futuro como condición  para continuar en su puesto y no precipitar una nueva crisis en el Ayuntamiento que obligara al PSOE a  improvisarle un sucesor. Los hechos demostrarán si el alcalde se va definitivamente en un ataque de dignidad o se traga las palabras como hizo cuando la crisis con Rojas Marcos por el caso Bazar España o cuando cambió de postura en el tema de las Cajas.

Reproducimos en negritas párrafos de la carta del alcalde y, a continuación, nuestras acotaciones:

1) Ya es pública mi decisión, que vengo madurando desde hace mucho tiempo…..

Monteseirín sigue tratando de aparentar que ha sido él y no Griñán quien ha decidido su marcha del Ayuntamiento, cuando su estrategia desde su clamorosa derrota (se parapetó tras el denominado ‘sector crítico’, ya que no tuvo el valor de presentarse él mismo) frente a Viera en el congreso socialista de julio de 2008 ha sido la de una numantina resistencia para evitar que el PSOE lo defenestrara antes de tiempo.

En segundo lugar, para evitar también que cuajara la alternativa interna (Emilio Carrillo) preparada por el partido con la antelación suficiente y dado su derrumbamiento en las encuestas y el rechazo que genera en la opinión pública (el 20% de los sevillanos que declaran conocer al alcalde  lo califican directamente con un cero y jamás ha aprobado en una encuesta durante sus 11 años de mandato, sin contar el demoledor resultado para él de la encuesta encargada por el PSOE a Julián Santamaría).

En tercer lugar y una vez emigrado Chaves (su gran valedor, no tanto por estima como por temer que abrir el melón sucesorio en Sevilla en mitad de un mandato equivalía a abrir la veda para que se hiciera lo mismo en la Junta de Andalucía en mitad de una legislatura, como así le acabó ocurriendo a él: Chaves se veía en el espejo de Monteseirín), una vez ido Chaves, decíamos, amagar con su dimisión a finales de 2009 ante Griñán al comprobar que no gozaba del favor del nuevo presidente, pero con un doble objetivo:

1)      Forzar su ratificación ante la supuesta falta de tiempo (17 meses por entonces) para que el PSOE buscase un candidato alternativo fuera del Ayuntamiento.

2)      En caso contrario, dejar colocado como sucesor  a Celis, el hombre encargado de convertir Sevilla capital en el califato del sector crítico frente a  la Ejecutiva Provincial liderada por Viera y pese a haber contado éste con  el 88,6% de los votos en el último congreso provincial socialista.

Monteseirín ha tratado de asaltar el PSOE de Sevilla desde la trinchera de la capital, parapetado en su condición de único alcalde socialista de una capital de provincia y de Sevilla como capital de Andalucía. Ha tratado deliberadamente de dividir el partido al sentirse ‘intocable’ por ser alcalde de Sevilla, desafiando de forma permanente la autoridad del secretario general y confiado en el manto protector de Chaves.

Monteseirín siempre ha jugado manejando los tiempos políticos para que el tiempo acabara jugando a su favor. Contaba con que su amago de dimisión nunca sería aceptada por Griñán a tan sólo año y medio de las elecciones y que ese año y medio le daría margen de maniobra para tratar de ganarse al nuevo presidente de la Junta, por una parte, y de invertir los sondeos contrarios a su persona mediante una intensa campaña mediática (puesta en marcha de Giralda Tv, compra de favores periodísticos a través de Marchena y del dinero de la publicidad institucional o de las empresas municipales; buzoneo de publicaciones laudatorias en los barrios…) y de captación de apoyo social.

Así, el alcalde habría intentado que Griñán hubiera actuado de presentador suyo en una conferencia que iba a pronunciar después de Reyes. Al no conseguir su propósito de que el presidente de la Junta le hiciera su loa política y  que ésta se interpretara como un aval a su persona, dentro y fuera del partido, pospuso la  conferencia ‘sine die’.

Más ejemplos de la estrategia del alcalde de ganarse apoyos sociales para que fueran valorados en la Casa Rosa: intentó que le otorgara la medalla de oro del Ateneo el nuevo presidente de la docta casa, Alberto Máximo Pérez Calero, médico como él y como agradecimiento por los favores municipales –ahí se vio que no eran gratuitos- a la entidad de la calle Orfila.

2) ….un muchacho de barrio, criado junto a la Facultad de Medicina, llegara en 1999 a la Alcaldía de la ciudad que “es bella porque siempre es nueva”.

Monteseirín trata en esta frase de justificar su ‘grandeur’ arquitectónica, como si Sevilla no fuera bella por el Guadalquivir, el conjunto histórico-artístico de la ciudad, la Catedral, la Giralda, el Real Alcázar, la torre del Oro, la Plaza de España, el parque de María Luisa y todo lo existente antes de su llegada a la Alcaldía sin necesidad del legado del alcalde: las ‘setas’ de la Encarnación, la torre Pelli, la biblioteca de Zaha Hadid en el Prado, la nueva Alameda de Hércules, el proyecto de ‘La piel sensible’ para la Alfalfa, Pescadería, el Pan y otras plazas del Centro…..

3) …superando las dificultades de todo tipo que (siempre los mismos) hemos ido encontrándonos por el camino.

Con ese “siempre los mismos” el alcalde ha anatemizado una vez más como miembros de una Sevilla retrógrada, ‘facha’, rancia, tradicionalista, ‘derechona’ y demás sinónimos a todos aquellos que han osado llevarle la contraria o criticarle en desacuerdo con su gestión, con el doble fin de presentarse ante el electorado de izquierdas como una víctima de esa Sevilla clasista de los de siempre y, por consiguiente, como un héroe/mártir de las clases populares, el hombre que desde una condición humilde llega a la Alcaldía para, levantando las ‘setas’ de la Encarnación por ejemplo, democratizar (¿?) las vistas sobre el caserío histórico que hasta entonces sólo podían disfrutar los ricos desde los miradores de sus casas-palacio. Mensajes simplistas (dicotomía bueno-malo) y demagógicos para consolidar la imagen de la existencia de dos Sevilla, acentuar los enfrentamientos de clase en vez del interclasismo y dividir en vez de integrar.

4) Hemos sido coherentes con un modelo de ciudad….

Monteseirín quiere hacer creer que ha actuado siempre conforme a un modelo previo de ciudad cuando, en todo caso, esa nueva ciudad que él presenta como su Arcadia feliz es la que resulta del lápiz del arquitecto Manuel Angel González Fustegueras y del proceso de participación ciudadana, que confluyen en el nuevo PGOU. Dicho de otro modo, el PGOU no es el fruto de Monteseirín, sino Monteseirín del PGOU. Poco de ese nuevo modelo de ciudad al que tanto remite el alcalde está previamente en sus programas electorales. Al contrario: la peatonalización de la Avenida es la condición necesaria para implantar un tranvía como sucedáneo del Metro y que por acumular tres años de retraso no iba a estar listo ni para las elecciones municipales de 2007.

Recuérdese que Monteseirín llegó a la Alcaldía por el ‘pacto del Metro’ entre Chaves y Rojas Marcos y que en la perspectiva de carecer de Metro todavía ocho años después, no podía presentarse a las elecciones con las manos vacías. Hizo, pues, de la necesidad virtud y a marchas forzadas construyó (destruyendo incluso los hornos almohades de la Puerta de Jerez) y presentó el tranvía como el ‘Metrocentro’, un sucedáneo de Metro penetrando hasta el Centro y cuya consecuencia era la peatonalización para abrir paso a vías y catenarias. El marketing político y electoral convierte esta improvisación en el modelo de ciudad del que alardea el aún alcalde.

5)…tras tantos años de proyectos eternamente pendientes de abordar…

Monteseirín ha querido pasar a la historia como el alcalde que resolvió las cuestiones pendientes de la ciudad (el solar del mercado de la Encarnación, el traslado de la Feria de Abril, el vacío del Prado de San Sebastián, la ampliación de Fibes….), pero algunas las ha dejado irresueltas (la Feria), otras las está resolviendo a un coste multimillonario (las ‘setas’ y el Palacio de Congresos) y ha dejado algunas nuevas para el futuro (el acuario de Delicias, la biblioteca del Prado).

Basó una de sus primeras decisiones nada más llegar a la Alcaldía y que resolvía una de esas cuestiones pendientes, como fue liquidar el edificio administrativo de Moneo que llenaba el espacio vacío del Prado, con el argumento de que ese dinero (unos 30 millones de euros) se debía destinar a modernizar los barrios y que había que ‘descentralizar  el Centro’ repartiendo sedes administrativas por los distritos y ahorrar recursos mediante la informatización y con Internet.

Al final, ha acabado preso de su megalomanía y creyendo que la modernidad de una ciudad se basa en costosísimos iconos arquitectónicos cuales nuevos estadios Olímpicos y no en el eficaz funcionamiento de los servicios públicos (transportes, limpieza) y en la construcción de amplios equipamientos (bibliotecas de barrio, centros cívicos, polideportivos, plazas, jardines..). Mientras alzaba las ‘setas’ en la Encarnación, alteraba la Alameda o ampliaba Fibes, los servicios públicos (Tussam, Lipasam) han acabado en la ruina. ¿Cuánto dinero queda de los convenios urbanísticos firmados en su día para equipar los futuros barrios de la ciudad?

6) Y hoy, aun cuando la crisis económica y financiera mundial está azotándonos como a todos de la forma más lacerante, con el desempleo…

Responsabiliza a factores externos, esa crisis mundial, del incumplimiento de su promesa electoral del pleno empleo y de una vivienda para todos y sin sorteo durante este mandato. Se arroga lo que se hace en la ciudad y culpa de lo que no se hace a las circunstancias y a “los de siempre”.

7) Sevilla volverá a ganar la partida frente a la resignación, el inmovilismo y la involución.

Monteseirín practica un doble lenguaje o una doble moral. Por una parte, ataca de forma sistemática a esa Sevilla inmovilista e incluso involucionista, para complacer así a los votantes de la izquierda, y por otra hace lo imposible por complacer y cortejar a esa Sevilla de las tradiciones de siempre, que supuestamente detesta y es un freno para sus planes modernizadores.

Ni Soledad Becerril ni Rojas Marcos, ni por supuesto Del Valle y Uruñuela, otorgaron tantas medallas de la ciudad (doce) a Vírgenes como ha otorgado Monteseirín; ni se inventaron el ‘urbanismo morado’ para alimentar de subvenciones a las cofradías  en descarada busca del voto popular; ni erigieron tantas estatuas a toreros y nobles en el Paseo de Colón o espacios públicos; ni frecuentaron tanto los salones de la aristocracia, los palcos de la Semana Santa o la plaza de toros de la Maestranza……

8) …..gracias con el alma por como habéis respaldado siempre nuestras ideas y nuestras propuestas en el foro de la democracia ciudadana. Ese apoyo y confianza me han permitido ser, después de estos más de diez años, la persona que más tiempo lleva desempeñando la tarea de alcalde de Sevilla desde que se instituyeron las alcaldías modernas, a principios del siglo XIX.

Esta es la mentira reiterada de Monteseirín, en la que insiste una y otra vez como un martillo pilón: que ha obtenido siempre el respaldo electoral en las elecciones municipales. Falso. Sólo ganó una de las tres a las que se ha presentado, y por mayoría relativa. Las primeras y las terceras las ganó el PP (Becerril y Zoido), y en sus tres mandatos tuvo que pactar (una vez con el PA, dos con IU) para lograr los votos que le faltaban para ser alcalde.

9) …..voy a dirigir mi vocación por la cosa pública a otras tareas, en mi condición de funcionario o en cualesquiera otras en las que mi formación y mi experiencia puedan seguir siendo útiles…

Lanza el mensaje de que quiere un nuevo cargo público, cuando en el comienzo de su carta reconoce que lleva 30 años en la política y los últimos quince sin bajarse del coche oficial (hasta el punto de que reconoce en su declaración de bienes que no tiene ninguno de su propiedad; no le hace falta) como presidente de la Diputación y de la FAMP y alcalde de Sevilla. Veremos hasta dónde se cumple el aserto de Griñán el pasado fin de semana de que el PSOE “no es ni una empresa, ni una ONG”.

10)….Un impulso renovado que, desde la continuidad del proyecto y los relevos generacionales que lo acompañen..

Con la expresión “los relevos generacionales”, Monteseirín está postulando de nuevo a Celis como su sucesor frente a personas de la vieja guardia del partido como pudieran ser Rosamar Prieto, Viera o el mismísimo Alfonso Guerra. Es curioso que hasta diciembre, cuando hizo el amago de retirada ante Griñán pese a que no hace mucho decía que quería seguir en la Alcaldía hasta el año 2020 por lo menos, Monteirín nunca se incluía entre los necesitados de relevo generacional, a pesar de que ya tiene más de 50 años y de que lleva 30 ocupando puestos y cargos en el PSOE y en la vida pública en nombre del PSOE.

11)La ciudad nos necesita a todos y a todas al margen de coyunturas o decisiones personales.

Monteseirín está llegando al final de su carta y por primera vez parece que habla en clave institucional y como alcalde de todos los sevillanos, pero….

12) Sevilla, la buena gente de Sevilla, se lo merece todo.

…al final vuelve a hablar de buenos y de malos al establecer una distinción implícita entre la buena gente, a la que nombra, y la mala, subyacente en la frase. Siempre el mensaje de las dos Sevilla y de que él va de bueno por la vida y como tal debe ser perdonado por sus errores de gestión, imputables más a su entorno (el manido recurso a los técnicos municipales en escándalos como el de los Bermejales, la cubierta de la Davis, la caseta de la Feria…) que a su persona.

Y así fue como Monteseirín dio las gracias a Sevilla (que le ha soportado tanto).

El cordero degollado

El alcalde aprovechó en Antares su presentación a Jaime Roures, dueño del grupo afín Mediapro, para quejarse del “espectacular y comprobado deslizamiento de una gran parte de los medios de comunicación de este país hacia posiciones de derecha pura y dura y, en algunos casos de derecha extrema”, y de “su desprecio, que alcanza con brutalidad no sólo a Obama y a Zapatero, sino que nos resulta bastante familiar a los socialistas andaluces….y sevillanos”. Monteseirín se equiparó a Obama y ZP, pues a nadie en la sala escapó que se estaba presentando a sí mismo como el mártir de esa supuesta conjura judeomasónica. El alcalde ve siempre fantasmas tras las esquinas y entiende cualquier crítica a su gestión como una agresión personal, de ahí que se coloque en la posición de cordero degollado  mientras monta sin pudor el botafumeiro de Giralda Tv y ‘Radio Alfredo’ a su mayor gloria personal. Lo mejor del caso es que cuando Roures tomó la palabra, empezó diciendo: “No estoy de acuerdo con lo que ha dicho el alcalde”. Y alguien entre el público exclamó: “¡Otro más!”.

El chiringuito mediático de Monteseirín

La portavoz municipal, Maribel Montaño, empezó la semana anunciando que los presupuestos sufrirán “ajustes de gastos” conforme al “principio de austeridad”. El alcalde a su vez avanzó que el tijeretazo a las delegaciones será de un 20% salvo en Bienestar Social, cuya dotación crecerá hasta los 9 millones de euros para atender programas de emergencia social. Monteseirín quiere aparecer como el paladín de los desfavorecidos por la crisis. Su problema es que carece de credibilidad; el año pasado dijo lo mismo y luego detrajo más de 1,5 millones de esta delegación con una modificación presupuestaria “de urgente necesidad” para, entre otros gastos, inyectar 72.000 euros a Giralda Tv, su particular Nodo.

Monteseirín y Montaño hablaban de austeridad justo cuando la Hacienda local aprobaba 115.000 euros más para la Tv del alcalde, que en estos tiempos de apreturas de cinturón ha pasado de dos directivos a siete: un aumento del 350%. Esta es la prueba del aserto de Monteseirín de que si se ausentaba de los actos públicos y delegaba en Celis no era por placearle como delfín y para conspirar contra Viera, sino porque se estaba ocupando de resolver el problema del paro en Sevilla. Qué mejor idea para  rebajar las estadísticas del INEM que triplicar el número de altos cargos en su marchenera televisión.

Doble lenguaje

El discurso oficial es que no hay dinero; la realidad demuestra que lo hay, pero sólo para los intereses políticos del alcalde. Por eso son un sarcasmo las palabras de la delegada de Cultura cuando, para justificar el recorte en casi dos millones de euros a la Sinfónica y al Maestranza, declaró: “hay una situación de emergencia social y ahora la prioridad es la creación de empleo”. Mientras Monteseirín alardea de que la Unesco ha otorgado a Sevilla el título de ‘Ciudad de la Música’ (vean http://www.youtube.com/watch?v=ACZyJKYTFKo) , Montaño, al contrario que el resto de Administraciones,  quita dinero a la orquesta y a su sede, por más que la propaganda oficial diga que aquí la música “se respira, es una forma de vivir y ahora el mundo también lo sabe”. Mejor que no lo sepa la Unesco, no vaya a quedar en peligro también este título además del de patrimonio de la Humanidad. La delegada quiere que los sevillanos comulguen con ruedas de molino cuando sostiene, impertérrita, que este recorte no afecta a la Sinfónica. Si con mucho menos dinero las prestaciones son las mismas ello significaría que hasta ahora se habría estado despilfarrando.

En este sentido, el profesor Mantero, ha escrito: “Parece que los regidores que mandan en nuestro Consistorio no entienden el valor de la música y, a lo peor, ni siquiera les gusta. ¿Alguien ha visto alguna vez a la delegada de Cultura en un concierto de la Sinfónica? ¿O al alcalde?”.

Más doble lenguaje municipal. Durante las protestas de los taxistas, el delegado de Movilidad declaró que no contribuiría a destruir empleo con dinero público. Al final ha pactado el rescate de al menos 14 licencias, con un coste de medio millón de euros.

‘Radio Alfredo’

No hay dinero para la cultura, pero sí para incrementar el chiringuito propagandístico de Monteseirín de cara a las municipales de 2011, por lo que pudiera pasar. Al nuevo Nodo de Giralda Tv, el alcalde  proyecta ahora unirle su particular ‘Radio Alfredo’, una emisora municipal que estaría sometida a las directrices de Marchena, y que se completaría con los apoyos y silencios cómplices de cierta prensa  que el valido del regidor se encarga de comprar usando de forma artera la publicidad institucional o la de las empresas del Ayuntamiento.

La idea de los propagandistas del alcalde es que su grupo multimedia –televisión y radio- se concentre en las abandonadas naves del Barranco, previa readaptación de las mismas a sus nuevos usos y pese al dinero europeo gastado previamente en su rehabilitación con otros fines. Se gastan fondos en montar una radio y en una nueva sede para Giralda Tv cuando ya el pasado mes de julio se invirtieron 49.000 euros en habilitar el edificio del Laredo para el chiringuito mediático de Monteseirín. Al final se despilfarra el dinero tres veces. Hasta ahora, sólo Giralda Tv habría requerido de las arcas municipales 1.344.000 euros, cifra casi equivalente a la detraída a la Sinfónica y al Maestranza

El libro de estilo

A los alumnos de las Facultades de Periodismo se les enseña que la noticia no es que un perro muerda a un hombre, sino que un hombre muerda a un perro. Para Giralda Tv la noticia consiste sencillamente en que no haya perro. Es decir, no cumplir, conforme a las bochornosas directrices de su libro de estilo ahora conocido, la función clásica que se le presupone a todo medio de comunicación: ser el perro guardián de la Democracia, con la misión de hincarle el diente a los escándalos, corruptelas y abusos del Poder.

Por si no hubiera quedado suficientemente claro con el tiempo dedicado diariamente al autobombo del alcalde, con el manual interno se ve de forma explícita la función propagandística y censora de la televisión pagada con el dinero de todos los sevillanos: silenciar las iniciativas de la Oposición, omitir las causas judiciales justo cuando Monteseirín  se enfrenta a los casos Mercasevilla y Unidad y dar prioridad a las noticias positivas del gobierno municipal.

Si, tal como acuñó el naturalista Bufón, el estilo es el hombre,  el libro de instrucciones de Giralda Tv traduce a la perfección el estilo sectario de gobierno de Monteseirín.

Vacas flacas

Numerosos proyectos-estrella de Monteseirín basados en el sistema de la concesión administrativa están paralizados o retrasados por la crisis. En este sistema de corte neoliberal, las empresas privadas ejecutan las obras públicas a cambio de su explotación económica durante un tiempo, tras el cual pasan a la Administración. Esta se libra de aportar toda o la mayor parte de la financiación, que indirectamente corre a cargo de los usuarios-contribuyentes, los cuales suelen pagar por el servicio un precio superior al objetivo como compensación al desembolso de la compañía  adjudicataria.

Este sistema lo ha utilizado Monteseirín para las ‘setas’ en la Encarnación (aporte en metálico de 25 millones de euros y entrega de la actual sede de la Hacienda municipal y de la nueva plaza para su explotación comercial), la ampliación de Fibes (aportación de 49 millones y de las parcelas anexas), edificio de la Gavidia (cesión de parte del mismo a cambio de su rehabilitación), mercado de la Puerta de la Carne y antigua estación de Cádiz (rehabilitación a cambio de la explotación de un parking subterráneo)…… y ahora ve cómo cuando los alemanes exigen por adelantado el pago de la madera para el revestimiento de las ‘setas’ no hay dinero para pagarles; cómo no puede afrontarse la desviación presupuestaria en Fibes; cómo queda desierto el concurso para la Gavidia y cómo Sando ni siquiera inicia el mercado ni el parking.

Celis dice ahora que la concesión administrativa sólo es adecuada en época de bonanza económica pero no para las de crisis, porque es casi imposible que una empresa pueda costear sola una obra y esperar  años para un beneficio. Omite Celis que estos y otros proyectos de Monteseirín  ahora paralizados o en demora fueron adjudicados en plena bonanza económica, como la línea 1 del Metro por la Junta de Andalucía. El  Ayuntamiento podría haber tomado buena nota de lo ocurrido con el Metro por el sistema de concesión: tres años de retraso, obras acometidas sin siquiera estudio previo del subsuelo y un sinfín de errores y chapuzas por el objetivo de maximizar el beneficio….hasta el punto de que la Junta ha abjurado de  más concesiones para las líneas futuras.

La realidad ha demostrado que las empresas adjudicatarias de los proyectos municipales carecían de suficientes recursos propios para acometerlas y que dependían del crédito bancario tanto como el Ayuntamiento del Estado y de la Junta. Pero eso debió haberse previsto mediante la exigencia de avales u otras garantías que, en todo caso, se han revelado insuficientes. El buen gobernante prevé las vacas flacas tras los siete años de vacas gordas y no piensa que todo el monte va a ser siempre orégano. La cuestión de fondo es también ideológica, ese terreno que tanto le gusta a Monteseirín (la modernidad, lo rancio, etcétera): un Ayuntamiento socialista que se encomienda a la iniciativa privada en vez de a la pública aplica un modelo político thatcheriano. Aún se recuerda en Gran Bretaña cómo Blair tuvo que paliar a costa del contribuyente la falta de mantenimiento de los ferrocarriles y de otros servicios entregados por Margaret Thatcher al sector privado por ese sistema de la concesión administrativa. La historia es la de siempre: privatización de los beneficios y socialización de las pérdidas.

Números rojos

Como  al perro flaco todo se le vuelven pulgas, el Ayuntamiento deberá presentar a la Junta un plan de estabilidad tras haber sobrepasado el nivel máximo de endeudamiento legal. Y eso que Celis sí supo aprovechar la época de bonanza económica y del dinero barato para renegociar los 420 millones de euros de la deuda municipal y diferir a largo plazo el pago de los créditos, lo cual dio un balón de oxígeno de 42 millones a las arcas municipales. El que venga detrás, ya sea Zoido o el propio Celis, que arree con la “herencia recibida” de Monteseirín: lo que el alcalde no paga ahora deberán pagarlo sus sucesores, como le pasó a su cuñado, Luis Navarrete, cuando le sucedió en la Diputación y las arcas estaban vacías.

Al Ayuntamiento no le salen las cuentas porque con la crisis y la menor recaudación de ingresos, el Estado deja de transferir a Sevilla 53 millones y porque el ‘agujero’ de Tussam roza ya los 60 millones de euros. El transporte público suele ser deficitario por definición (el usuario sólo paga realmente el 50% del precio del billete), pero si el déficit de Tussam ha pasado de 15 millones de euros en la época de Becerril a los 60 millones actuales se debe a la política de ‘barra libre’ aplicada en la empresa municipal durante casi un decenio. Para Monteseirín ha sido más cómodo comprar la paz social en Tussam antes que meter en cintura a unos sindicatos que sólo han reclamado privilegios sin importarles la situación crítica de la empresa. Al final siempre paga Sevilla.

Orden de prioridades

El alcalde, como ha recordado su delegada de Hacienda, ha dicho que si no se pueden cuadrar las cuentas no habrá más remedio que renunciar a la prestación de algunos servicios.

Tussam perderá 60 millones de euros, pero hace unos días tuvo que transferir 450.000 euros de sus fondos para pagar la dirección facultativa de las obras de ampliación del tranvía, y a finales de septiembre el Ayuntamiento lanzó a bombo y platillo Giralda Televisión, con una dotación de 900.000 euros.

Osea, que se recortarán servicios a los sevillanos, pero no faltará dinero para los proyectos electoralistas y el aparato de propaganda del alcalde.

La parte contratante

La portavoz sufrió un freudiano ‘lapsus linguae’ al decir que Giralda Tv sólo es legal desde que hace días emite en digital. Como quien hace la ley o la interpreta hace la trampa, alega que la TV marchenera no era ilegal, sino que su  situación era “alegal y transitoria” cuando tomó “prestada” durante 6 meses (esto no es transitoriedad, sino contumacia) la frecuencia de una empresa embargada por deber  600.000 euros a la Seguridad Social y cuyos trabajadores acabaron en la calle previa huelga por impago de salarios. La ley impide a una Administración contratar con morosos, pero el Ayuntamiento se escudó en otra argucia. Se creó una empresa interpuesta, con la morosa de accionista (¿para eso sí tenía dinero?), y así la Montaño mantuvo que contrató no con la segunda, sino con la primera. Cuando Groucho Marx dijo aquello de “¿por qué no hacemos que la primera parte de la segunda parte contratante sea la segunda parte de la primera parte?”, nunca pudo imaginarse que iba a servir de inspiración a un Ayuntamiento como el de Sevilla. Será porque es de risa.

Monteseirín reinventa el Nodo

Es tan verídica como las historias del Pali la anécdota de aquel forastero que cuando vino aquí y vio el lema NO8DO en el escudo de la ciudad no tuvo más ocurrencia que decir lo siguiente: “Fíjate si será rancia Sevilla que todavía anuncian el Nodo”. Había confundido el escudo otorgado por el rey Alfonso X el Sabio a Sevilla con el noticiario documental instaurado obligatoriamente por Franco en todos los cines de la época como instrumento de propaganda del régimen.

Hoy, el que dice lo mismo que el forastero de la anécdota es el Consejo Audiovisual de Andalucía en su informe sobre Giralda Digital, la televisión municipal convertida tan en la voz de su amo de Monteseirín como lo era el Nodo de Franco. Así, entre otros muchos datos demoledores sobre el sectarismo de la emisora controlada por el marchenero valido del alcalde, el estudio del Consejo demuestra que sólo el 0,9% del tiempo de voz está dedicado a la oposición municipal; que las menciones al equipo de gobierno casi siempre abren los informativos; que el 88% del tiempo destinado a partidos políticos es para la formación del señor alcalde….y así sucesivamente.

Tras este informe oficial es cuestión de darle a la moviola para reír por no llorar al recordar lo que dijo el pasado mes de abril Alfonso Rodríguez Gómez de Celis sobre la caja tonta de Alfredo: “Si no tuviese como objetivo ofrecer el servicio público que no pueden dar otras soluciones más que las del Ayuntamiento, no tendría sentido hacerla”. ¿Servicio público? Pues aquí, amigo Celis,  tenemos la prueba del auténtico carácter de la televisión marchenera del alcalde: ser el nuevo Nodo, pero a escala local y en ¿plena? Democracia. Ya ven, Monteseirín, que va por la vida de adalid de la modernidad, ha acabado reinventado las rancias prácticas de antaño. Será, como decía Marx, que la historia se repite dos veces: la primera como tragedia y la segunda como comedia.

Ahora ya sólo falta que don Alfredo aparezca en su televisión digital, que por ser tan antigua emite aún en analógico, inaugurando en su Nodo particular, como aquel otro de infausta memoria, el último pantano.

El de Melonares, naturalmente.

Autoridad sólo en la tarjeta de visita

Torrijos, vicepresidente segundo de Mercasevilla y que figura como asistente en  las actas de celebración del comité ejecutivo de la empresa municipal, la comisión de administración y la junta general de accionistas que aprobó en octubre y noviembre de 2005 la operación de venta de suelos de Mercasevilla, insiste en declarar que no ha firmado nunca un pliego de condiciones, ni ha asistido a ninguna mesa de contratación, “porque –asevera- no están en mi potestad, ya que no tengo autoridad para ello”.

Para empezar, su aserto no se compadece con su condición de primer teniente de alcalde de la ciudad y vicepresidente segundo de la empresa municipal. Pero aunque fuera cierto lo que dice Torrijos, no que no es autoridad, sino que no estuvo en la firma de pliegos ni en la mesa de contratación -con lo cual se escuda tan detrás de los técnicos como el alcalde-, debería explicar para qué sirve el Consejo de Administración y para qué su presencia en el mismo. Se presupone que el máximo órgano de la empresa  es el que en última instancia supervisa y aprueba una operación de venta de suelo por valor de más de 100 millones de euros.

Imaginemos que lo ocurrido en Mercasevilla hubiera ocurrido en una compañía privada. ¿Se habría tragado la Junta General de Accionistas la explicación del Consejo de Administración de que fue engañado por sus técnicos o ‘ipso facto’ habría sido destituido el Consejo en pleno y todos los implicados en el proceso de venta? Aquí la Junta General de Accionistas es Sevilla, y Torrijos omite que al menos tiene una responsabilidad ‘in vigilando’, pues para eso lo han puesto ahí los sevillanos, para que vele por los intereses de la ciudad y no sólo para pasar por caja a fin de mes, ¿verdad, Antonio?

Atarazanas y Patio de los Naranjos

El Caixafórum que La Caixa construirá en Sevilla será una realidad en las Atarazanas en el año 2015 gracias al proyecto de Guillermo Vázquez Consuegra. Contaba Carlos Mármol en la competencia que aunque ahora el arquitecto sevillano no deja de recibir premios y grandes encargos, no siempre fue así y que hasta hace unos años la mayor parte de su obra estaba fuera: en Vigo, Valencia, Génova, Cartagena….. Naturalmente, como en Sevilla se cumple más que en ninguna parte el dicho de que nadie es profeta en su tierra, si Consuegra no se hubiera lanzando a competir por el mundo y triunfado fuera, a estas horas seguiría como en sus inicios: haciendo sólo VPO para Emvisesa.

Lo mejor del Caixafórum que ha diseñado consiste, a mi juicio, en cómo libera los cegados arcos de las Atarazanas que dan a la calle Dos de Mayo para, recuperando su antigua luz y transparencia, permitir el libre acceso de los transeúntes y convertir el antiguo astillero en una nueva plaza pública para la ciudad.

Mientras La Caixa abre las Atarazanas a toda Sevilla, a pocos metros, el Arzobispado sigue haciendo lo contrario: manteniendo clausurado al paso de los sevillanos el Patio de los Naranjos de la Catedral, que estuvo expedito durante siglos hasta que se le dio el cerrojazo para obligar al turisteo a pasar por taquilla.

Y es que aquí los papeles están cambiados: la Caja catalana recupera y le abre a Sevilla su patrimonio histórico y la Iglesia cierra el patrimonio de Sevilla para hacer caja.