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‘Excepcionar’

De la polémica sobre el nombramiento de varios funcionarios como altos cargos y la morterada que van a cobrar, más aún que con Monteseirín (a quien Juan Ignacio se la dé, Asunción Fley se la bendiga),  me llama la atención hasta el lenguaje administrativo para estas designaciones: “Excepcionar, en base a la ley, los siguientes puestos…”. ‘En base a’ es uno de esos latiguillos copiados por los tecnócratas del inglés. ‘Excepcionar’, aunque admitido por la Academia, es un palabro jurídico que viene a significar que se alega una excepción legal durante un juicio, pero lo suyo habría sido el verbo ‘exceptuar’. ¿Qué está denotando el uso de esta terminología en la nueva corporación dominada por abogados y presidida por un juez? La traslación del argot jurídico al lenguaje oficial, de lo que se infiere la ‘judicialización’ de la vida política municipal. Yo creo que en la RPT de los altos cargos de Zoido falta, como en las modernas Redacciones de los periódicos, un corrector de estilo, si se me permite ‘excepcionar en base a’ nuestra lengua la justificación del puesto.

 

El sexo de los ángeles

El Ayuntamiento pide 223.880 euros al fondo estatal del empleo para  gastárselos en “la corrección del lenguaje sexista en los documentos soportados por los sistemas informáticos”. Hasta ahora, por ejemplo, se usa el término “los ediles” para referirse indistintamente a concejales de sexo masculino y femenino, lo cual constituye un agravio de género que vulnera la bibianesca ley de Igualdad al no discriminar positivamente a la mujer. Peor aún: las féminas municipales no deben ser incluidas en el determinante masculino plural “los”. ¿Cómo gastaremos el dinero en corregir este sexismo lingüístico? Podría emplearse el término “los edilos” para designar a los concejales varones y  “las edilas” para las concejalas. Cuando se quiera nombrar conjuntamente a “edilos” y “edilas”, para ser políticamente correctos debería de usarse “les ediles”.  La historia cuenta que con el Imperio a punto de caer ante el Islam, Bizancio perdía el tiempo discutiendo sobre el sexo de los ángeles. Aquí, con 70.000 parados, el Ayuntamiento gasta el dinero en cuestiones bizantinas.