El Ayuntamiento de Sevilla plantó en la última campaña menos árboles que los que taló

Sembró 1.151 y autorizó el apeo de 1.167

El balance arbóreo de Sevilla capital durante la campaña de siembra 2023/2024 fue negativo, ya que el Ayuntamiento plantó 1.151 ejemplares pero autorizó la tala, mediante fichas de apeo, de 1.167. A esta cifra oficial habría que añadir una estimación de otros 600 eliminados. Estos fueron algunos de los llamativos datos ofrecidos por el geógrafo Antonio Fajardo, que en representación de la asociación Parque Vivo del Guadaira intervino en la reciente mesa redonda que organizaron la Real Academia Sevillana de Buenas Letras y la Asociación de Defensa del Patrimonio de Andalucía (ADEPA).

La mesa redonda versó sobre ‘El Patrimonio Verde de Sevilla en peligro: situación y soluciones’, y Antonio Fajardo hizo justicia al título de la misma con la serie de datos que aportó durante su intervención, centrada en ‘El arbolado de Sevilla un año después de la borrasca Bernard’. El geógrafo se preguntó si crece la cobertura aérea en Sevilla. Su respuesta fue negativa, ya que afirmó que como mucho crece el número de árboles pero no la cobertura.

A título comparativo, la cobertura arbórea de Sevilla es del 20,3%, superior a las de Edimburgo (17%) y Londres (14%), pero inferior a las de Atlanta (37%), Madrid (26%), Barcelona (24%) y Nueva York (21%).

En la última campaña de siembra (la 2023/2024) el saldo entre árboles plantados y apeados fue negativo, ya que se registraron 1.167 árboles talados con fichas de apeo frente a 1.1151 sembrados. Pero a estos datos Fajardo añadió la estimación de otros 600 ejemplares talados o perdidos.

Según las estadísticas oficiales, la media de las cuatro últimas campañas es de 3.178 árboles sembrados por temporada, conforme a esa serie:

-Campaña 2020/2021: 3.570 árboles plantados (había el compromiso de llegar a 5.000).

-Campaña 2021/2022: 5.560 árboles sembrados.

-Campaña 2022/2023: 2.431.

-Campaña 2023/2024: 1.151 (se desconoce si se realizó una segunda fase).

Antonio Fajardo (a la derecha), durante su intervención en la sede de la Real Academia Sevillana de Buenas Letras

No se contabiliza la situación de los árboles de propiedad privada. Para el geógrafo, el saldo negativo debe de ser más acusado aún, por el retroceso en el patrimonio vegetal que se ha producido en diversos barrios de la ciudad.

Además, la tasa de arboles que no prosperan es muy alta en los dos primeros años: entre el 8% y el 23%. Y no se valora lo suficiente lo que supone la pérdida de un árbol maduro, ya que ofrece una cobertura de sombra de entre 20 m2 y 100 m2, frente a los 5 m2 de un ejemplar joven.

LA BORRASCA BERNARD

La tesis de Antonio Fajardo es que los vientos de la borrasca Bernard el 22 de octubre de 2023, aun siendo excepcionales no fueron tan catastróficos como para haber producido los daños catastróficos que sí se registraron en el arbolado de Sevilla. Desgraciadamente en su opinión, los datos que existen sobre esos daños son contradictorios y poco precisos, muy en línea con la escasa transparencia en materia de arbolado.

La delegada de Parques y Jardines, Evelia Rincón, habló al día siguiente del paso de la borrasca de mil ejemplares caídos, pero según Fajardo no se ha referido a los que luego tuvieron que se apeados como consecuencia de las revisiones. En su opinión, el destrozo en el arbolado parece haber sido favorecido por el mal estado de los árboles o las malas prácticas, como las canalizaciones realizadas en la calle Ifni (Heliópolis).

Las fichas de apeos del mes de noviembre del año 2023 sólo tienen referencias de 230 árboles, pero están claramente incompletas al faltar datos de cuatro distritos y no incluir
datos del arbolado situado en los parques. Fajardo ha constatado de forma fehaciente
que la información sobre los distritos tampoco está completa.

Los jardines históricos sufrieron, según el gobierno local, la pérdida de 59 ejemplares y permanecieron cerrados durante semanas.

Un informe de noviembre de 2023 de Tecnigral tras una revisión de emergencia
del arbolado por los daños de Bernard recomendaba la tala de 278 ejemplares, de
los que el propio informe señalaba que ya se habían ejecutado 150. A juicio del geógrafo se ha perdido la oportunidad de valorar en profundidad cuáles han sido los factores
que han provocado que se acusen unos daños tan importantes en el patrimonio verde de la ciudad.

Efectos de la borrasca Bernard

No se dispone de información sobre daños en el arbolado privado ni sobre los de titularidad de otras Administraciones Públicas.

La estimación de Fajardo es que al menos 2.000 árboles se perdieron o fueron gravemente dañados por la borrasca Bernard, árboles maduros y de gran porte en su mayoría.

UN AÑO DE MALAS NOTICIAS

Tras el paso de la borrasca Bernard no han hecho más que producirse malas noticias para el patrimonio verde de la ciudad. Fajardo ha destacado las siguientes:

-332 árboles apeados sólo por las obras de la línea 3 del Metro en Pino Montano (nuevas plantaciones 1.015).
-79 árboles apeados sólo por las obras del tranvibús en Sevilla Este (nuevas plantaciones, 281 árboles y palmeras).
-85 árboles apeados por el nuevo desarrollo urbanístico en la Cruzcampo.
-389 árboles señalados para ser eliminados en Tablada (80% de los existentes; consultores independientes señalan 46 como eliminables).
-200 arboles señalados en el entorno del Hospital Militar.
-Abandono del parque de Palmas Altas, utilizado como patio trasero de las obras de Metrovacesa.
-Inicio de recalificación de una hectárea de espacio verde en las inmediaciones del estadio Sánchez Pizjuán (Nervión) y plan de ocupación del espacio libre junto al estadio Benito Villamarín (Heliópolis).

El ficus de San Jacinto, dado por muerto por el Servicio de Parques y Jardines

-Muerte del ficus monumental de la calle San Jacinto (Triana).

CONCLUSIONES

El geógrafo llegó en su conferencia a las siguientes conclusiones:

-Existen numerosos instrumentos e iniciativas para proteger el arbolado y para
ampliar los espacios verdes.

-Estos instrumentos son perfeccionables: debilidad institucional del Servicio de
Parques y Jardines. Es necesario mejorar la coordinación entre servicios, y
especialmente con la Gerencia de Urbanismo y EMASESA.

-Se incumple la normativa urbanística de protección del arbolado y de la tipología de ciudad-jardín. Esta normativa se está quedando desfasada.

-Pese al esfuerzo inversor de los últimos años, es insuficiente y no compensa la pérdida provocada por el retroceso del arbolado privado y la derivada de la falta de atención al arbolado maduro.

-Ante una situación de emergencia climática falta liderazgo político para considerar el arbolado no como un mero mobiliario urbano. Como ser vivo que es, y dadas sus importantes funciones, debe ocupar un lugar prevalente frente a otros servicios e infraestructuras.

-El arbolado maduro de gran porte no es atendido suficientemente. En cuanto
hay problemas se suele tomar la decisión mas fácil y económica: eliminarlo.

-Pese a que existen más medios, la situación del arbolado en Sevilla no mejora.

Las borrascas serán cada vez más virulentas para el arbolado de la ciudad

-Pese a las pérdidas extraordinarias del año 2023 (borrasca Bernard), el programa de plantaciones de la campaña 2023/2024 fue el menor en años: la cobertura arbórea retrocede.

-Fenómenos como Bernard se repetirán en el futuro y con más virulencia, por lo que hay que estar preparados.

-Difícilmente las infraestructuras verdes podrán ejercer su papel de elemento fundamental para mitigar los efectos del calentamiento global.

-Los gestores de la ciudad no asumen los compromisos adquiridos (Declaración de Emergencia Climática, 2030 Climáticamente neutrales) y no escuchan a la sociedad civil, no son transparentes.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *