El consumo para garantizar la actividad futura en el complejo minero pasaría de 4,9 hm3/año a 10,1 hm3/año

La compañía Atalaya Riotinto Minera, que opera la histórica mina de Riotinto en la Cuenca Minera onubense, ha solicitado a la Junta de Andalucía una modificación de las características de la concesión de aguas públicas para uso industrial-minero de que disfruta actualmente, con el fin de duplicar el volumen. Éste pasaría de 4,9 hm3/año a 10,1 hm3/año, si bien hay discordancias entre la Memoria justificativa presentada por la compañía y la cantidad estimada por el Gobierno andaluz, el cual la ha rebajado a 9,03 hm3/año.

Atalaya evalúa de esta manera el consumo de agua en el complejo minero de Riotinto:

–Planta de Tratamiento del Mineral (PTM) : La ampliación de la PTM, hasta un ritmo de tratamiento de 15 Mt/año, del Proyecto Río Tinto (PRT) requería una disponibilidad extra de agua fresca que justificó la solicitud de derivación temporal de recurso presentada en el año 2021. El consumo neto de la PTM ronda los 6,53 hm3/año, con la siguiente distribución:

La flotación alcanza un 42% del total. Las ratios son de 0,10 – 0,19 m3/t. Además, existe un consumo adicional de 1,7 hm3/año, más variable en función de la pluviometría anual, humedad de los lodos, etc., vinculado a la recirculación continua (del orden de 30 hm3/año de agua gestionados) de aguas-lodos entre PTM y balsas de estériles y a las pérdidas de agua que se producen por evaporación (2,4 hm3/año) y oclusión en los sólidos decantados (5,9 hm3/año).

La trituración requiere un 6% del volumen total de agua fresca. La ratio
es 0,014 – 0,025 m3/t.

La molienda supone un 52% del volumen de agua. La ratio varía entre
0,13 y 0,23 m3/t.

Complejo minero de Riotinto

–Planta ELIX (metales de alta pureza): El agua necesaria para el proceso proyectado en la Planta ELIX (agua fresca) procederá de las tomas concedidas al Proyecto Río Tinto mediante la actual concesión de agua. Ésta será tratada en una planta de ultrafiltración y ósmosis inversa. El volumen de agua necesario para satisfacer la demanda se establece en 0,3 hm3/año.

–Mitigación de emisiones difusas: Por último, es necesario destacar el consumo de agua utilizada en la mitigación de la generación de emisiones difusas, que supone un volumen de 1,5 hm3 al año, susceptible de ir en aumento debido a ampliación temporal del periodo de verano derivado del calentamiento del planeta y aumento de la superficie de riego.

Atalaya destaca que prioriza el uso eficiente del agua y la máxima recirculación de las aguas internas del complejo, con el objeto de reducir al mínimo indispensable los aportes externos de agua embalsada. Se trabaja en circuito cerrado y con un régimen de vertido cero en condiciones normales de operación.

JUSTIFICACIÓN

La compañía minera ya no tiene plenas garantías en el suministro de agua para sus procesos mineros y metalúrgicos debido a la disminución de las lluvias y a la variabilidad de las mismas. Desde principios de los noventa se detecta un descenso importante en la media de treinta años de las series de precipitación y aportaciones, que hasta entonces había permanecido bastante estable. La serie de precipitaciones anuales para el periodo 1940/41-2017/18 para el conjunto de la Demarcación Hidrográfica Tinto-Odiel-Piedras se refleja en la siguiente figura:

Hoy, este cambio ya consolidado en la precipitación provoca que los cálculos basados
en la serie corta de precipitación proporcionen menores recursos renovables y
aportaciones. Así, en el periodo reciente (1980/81 a 2017/18) se aprecia una
reducción de la precipitación media anual en el conjunto de la Demarcación Hidrográfica del Tinto-Odiel-Piedras del 1,5%, siendo más acusados en la Cuenca Minera, con una variación del 2,2%., como se aprecia en la siguiente figura:

Otro hecho relevante que destaca la compañía minera es el aumento de la variabilidad de la precipitación, lo cual se traduce en que el sistema hidrológico se hace cada vez más impredecible, y en el caso de los recursos embalsados o de las pluviales, más difícil de gestionar. La distribución mensual y espacial de la precipitación es cada vez más irregular, habiendo algunos meses bastante lluviosos (otoño-invierno), y una duración del periodo seco, sin eventos de precipitación, creciendo año a año desde 1990, o el
aumento de los días de lluvia con elevada intensidad horaria.

Asimismo, Atalaya hace referencia a un estudio realizado por el CEDEX sobre:

-Cálculo de los porcentajes de cambio en la escorrentía trimestral.

-Cálculo de los porcentajes trimestrales de cambio para el horizonte 2039
(OND: oct, nov, dic; EFM: ene, feb, mar; AMJ: abr, may, jun; JAS: jul, ago,
sep).

De esa manera, se han recopilado para la Demarcación Hidrográfica Tinto-Odiel-Piedras 8 valores para cada unidad territorial: 4 trimestres y 2 trayectorias de concentraciónm representativa (RCP), que son los que se recogen en la siguiente tabla:

En particular, se prevé que conforme avance el siglo XXI se evidencien los
siguientes fenómenos en la Demarcación Tinto-Odiel-Piedras:

-Una reducción considerable y creciente de la escorrentía superficial en
los próximos años, para ambos escenarios de emisiones considerados,
RCP4.5 y RCP8.5, cuyos valores promedio son, respectivamente: 2% y 11%
para 2010-2040; 10% y 20% para 2040-2070; y 18% y 29% para 2070-2100,
respecto del periodo de control 1961-2000 (CEDEX, 2017);

-Un incremento en la frecuencia e intensidad de sequías (CEDEX, 2017).

-Un porcentaje de cambio mayoritario en la precipitación máxima diaria
acumulada: se encuentra en el 15% para el escenario de emisiones
RCP4.5, mientras que en el RCP 8.5 no se ha estudiado el cambio en la
precipitación acumulada debido a que no existe cambio en la
precipitación, según la Evaluación Preliminar del Riesgo de Inundación
correspondiente al tercer ciclo de planificación.

En este contexto de escasez y variabilidad de las precipitaciones registradas durante los últimos años, así como de importante disminución de las lluvias y aportaciones achacables al calentamiento global, en horizontes temporales no muy lejanos, mantener la referida capacidad de proceso de la Planta de Tratamiento de Mineral requiere según Atalaya no sólo garantizar la demanda de suministro de agua, sino también afianzar los recursos disponibles ante las implicaciones y condicionantes que las previsiones futuras pueden deparar para la gestión de las aguas superficiales y pluviales.

Los principales aspectos introducidos en la solicitud de modificación de sus
características se basan en:

–La modificación del volumen de las tomas de aguas superficiales hasta un
máximo de 6,6 hm3/año. Este aumento se basa en la existencia de recurso
disponible en las infraestructuras vinculadas al suministro de agua al Proyecto Río Tinto (PRT), el denominado Sistema de Explotación Odiel-Campofrío-Aguas Limpias,
conforme al volumen actualmente autorizado (concesión vigente más
autorización de derivación temporal).

–La consolidación como sistema hidráulico integral (Odiel-Campofrío-Aguas
Limpias) de las infraestructuras que así operan ya en el PRT, así como politoma
interdependiente las captaciones de aguas pluviales existentes en el interior del recinto minero.

La incorporación del efluente regenerado de la EDAR Cuenca Minera y el incremento del volumen asociado a Corta Atalaya permitirán complementar el Sistema hidráulico de PRT en periodos de sequía pluviométrica, escasez hídrica o situaciones que produzcan déficit en el balance de aguas (incremento de la garantía de suministro y de seguridad hídrica).

–La incorporación de una toma complementaria: efluente regenerado de la
EDAR Cuenca Minera. Frente a la variabilidad de las tomas de aguas pluviales y
superficiales, el efluente constituye un recurso adicional con elevada garantía
de suministro, especialmente en estiaje y sequías.

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