No sé si habrá sido un pacto a la catalana o la creencia de que, como canta -¡y cómo canta!-, la última encuesta de la Junta, creemos vivir en el oasis andaluz o en el mundo feliz de Aldous Huxley , pero ha pasado inadvertida la estadística policial según la cual Sevilla y Málaga son, junto con Madrid y Baleares, las provincias más corruptas de España. En los últimos años, la Policía ha dado en Sevilla 24 golpes contra los delitos ‘de cuello blanco’, con 57 detenidos. Otrora, cuando se publicaban estas estadísticas por países, los más corruptos eran siempre las ‘repúblicas bananeras’, esos regímenes tercermundistas donde la única ley imperante para cualquier negocio era la de la ‘mordida’, sin necesidad de sofistificaciones como facturas falsas, ventas amañadas de suelo y demás. Y mira por dónde, cuando ahora se divulgan estadísticas nacionales, resulta que su equivalente español es Sevilla, de lo que se deduce que más que para la película ‘Knight and day’, de Tom Cruise, esto hubiera sido el escenario ideal para rodar la cinta ‘Bananas’, de Woody Allen.
Un tupido velo
Deja un comentario