Nuevas construcciones y demoliciones alrededor de la residencia universitaria erigida en la plaza de la Marina Española
El próximo 22 de julio (2023) se cumplirán dos años desde que el Pleno del Ayuntamiento de Sevilla aprobó una moción presentada por el grupo Adelante Sevilla para que el gobierno local, dirigido entonces por el socialista Juan Espadas, elaborara un Plan de Protección de la barriada Elcano, históricamente vinculada a los astilleros sevillanos. Sin embargo, en el tiempo transcurrido desde entonces no se ha observado sobre el terreno la aplicación de ninguna medida conservacionista de la tipología tradicional del barrio obrero, caracterizado por sus casas de una sola planta con porche delantero y patio trasero entre hileras de naranjos. Su transformación arquitectónica continúa, especialmente en el entorno de la residencia universitaria que se ha construido en la plaza de la Marina Española.
La moción que se aprobó en el Plano de julio de 2021 instó al gobierno local a que iniciara los estudios para la definición de un Plan Especial de Protección de la barriada Elcano «que impida -rezaba el texto- la destrucción del patrimonio urbanístico, edificatorio, histórico e identitario del barrio, con especial atención a las viviendas originales y a la Parroquia de Nuestra Señora del Mar».
También señalaba que el Consistorio, en coordinación con el Distrito y contando con la participación de la población del barrio, desarrollara los equipamientos públicos necesarios en los suelos de su titularidad, y articulara las medidas necesarias para que los equipamientos privados abandonados reviertan nuevamente sobre la ciudadanía.
Adelante presentó aquella moción conservacionista pese a que teóricamente, según expresó el aún alcalde en funciones, Antonio Muñoz, cuando en aquellos tiempos era delegado de Hábitat Urbano, Turismo y Cultura, el vigente Plan General de Ordenación Urbana ya otorga una protección especial al núcleo del barrio, la zona delimitada por líneas amarillas en en el siguiente mapa:
Tan poco resultado dio la iniciativa aprobada por el Pleno municipal, teórico órgano de la soberanía del pueblo sevillano, que casi un año después, el 11 de mayo de 2022, las asociaciones Bermejales Activa, Club de la 3ª Edad de Elcano, Parque Vivo del Guadaira, SOS Santa Clara y Palmera Agenda 29 convocaron una manifestación ante las obras de construcción de un nuevo inmueble en el número 13 de la calle Falúa y de la residencia universitaria en la plaza de la Marina Española para denunciar, dijeron, «la situación de abuso urbanístico que ocurre a diferentes niveles de gravedad en toda Sevilla, por una interpretación sesgada de la normativa del PGOU, que ha propiciado arboricidios promovidos o permitidos a los constructores desde la Gerencia de Urbanismo, facilitando edificaciones fuera de tipología y con una volumetría exagerada, tan exagerada que vulnera el derecho a la intimidad y no solo eso, sino que se llega a hundir a los vecinos colindantes en un pozo de oscuridad.
Las entidades convocantes señalaron especialmente la degradación en los barrios de tipología ciudad-jardín de Sevilla: Elcano, El Porvenir, La Palmera, Nervión y Santa Clara. Teóricamente, el PGOU protege al arbolado y esta tipología edificatoria, pero la ocupación y destrucción de arbolado y jardines y el aumento desmesurado de la volumetría continuaba ya por entonces sin que el Ayuntamiento actuara. En barrios como Elcano el aumento de la volumetría ahoga a los vecinos colindantes, privándoles de luz y ventilación, lo cual suponía a juicio de los convocantes una intromisión en su privacidad y alteraba la calidad del paisaje urbano.
Consideraron, asimismo, bochornoso ver cómo se permitía construir residencias de
estudiantes fuera de escala, «que en definitiva -afirmaban- son hoteles camuflados, y ajenas la tipología de la zona, como ha sucedido en La Palmera, Elcano, el Porvenir. Aseveraron que en otros países y ciudades europeas, el patrimonio y los estilos arquitectónicos de las zonas de ciudad-jardín se protegen, mientras que en Sevilla, si hay un nicho de negocio se envían al olvido.
Igualmente, afirmaron que el Ayuntamiento es el responsable de permitir el deterioro de la calidad de vida con la construcción de casas particulares de una volumetría que no respeta ni a los vecinos colindantes, tapiando literalmente toda una fachada posterior de pisos, de manera que, a 1,5 metros de las ventanas y balcones, los vecinos sólo ven ladrillos, o pierden su intimidad.
Los manifestantes hicieron una parada ante el número 13 de la calle Falúa, vía teóricamente incluida dentro del perímetro de protección del núcleo original de la barriada Elcano, inclusión que no ha sido óbice para que se haya producido la siguiente evolución:
La casa tradicional de una sola planta existente en el número 13 de la calle Falúa
Vista parcial de la acera de los impares de la calle Falúa, con la casa número 13
La casa número 13 de la calle se pone en venta, con carteles anunciadores en las rejas
La casa cambia de manos, se derriba y se empieza a construir un nuevo inmueble, más alto
La tipología del nuevo inmueble contrasta con la del anterior y con la de los colindantes
El nuevo inmueble sobresale, con tres plantas de facto, sobre las casas tradicionales
La construcción de la nueva residencia universitaria Yugo Bermejales al amparo del PGOU de Monteseirín, tratada en varios informes anteriores, en el corazón de la barriada, la plaza de la Marina Española, parece haber servido para acelerar la transformación de su entorno.
Justo a la derecha (vista de frente) de la nueva residencia universitaria, donde antiguamente había una casa de planta baja, ahora se continúa construyendo un inmueble que albergará seis viviendas.
Vista frontal del antiguo colegio Elcano, antes de su derribo para la residencia universitaria
A la derecha del mismo había una casa tradicional, de una sola planta
Otra imagen de la casa existente a la derecha del antiguo colegio Elcano
Compárese la foto anterior con ésta, en la que ya aparece la residencia universitaria (a la izquierda) y, aún en construcción, el nuevo inmueble para 6 viviendas (a la derecha)
En la confluencia de la calle Nuestra Señora del Carmen con la Plaza de la Marina Española, frente a la nueva residencia universitaria, se está construyendo en una casa antigua una segunda planta que aparentemente avanza más allá de la vertical de la fachada.
Construcción de una nueva planta en una casa tradicional frente a la residencia estudiantil
Y a pocos metros, en el número 31 de la calle Bergantín, teóricamente incluida en el perímetro que protege el vigente PGOU, ha aparecido un cartel de la empresa de demoliciones GHB (a la derecha en la siguiente imagen) y se ha visto a operarios retirando tejas del edificio (ángulo superior izquierda de la imagen), indicios que invitan a pensar en la pérdida de otra casa tradicional de la barriada Elcano y su futura sustitución por un inmueble de distinta tipología.
Cartel de una empresa de demoliciones en el 31 de la calle Bergantín, con la nueva residencia universitaria en la plaza de la Marina Española alzándose sobre la antigua casa
La casa ya completamente demolida a mitad de junio de 2023
El solar resultante, a finales de junio de 2023
El nuevo alcalde de Sevilla a partir del 17 de junio, José Luis Sanz, ha anunciado que está trabajando en la configuración de las áreas y delegaciones de su gobierno, que incluirá cuatro nuevas y, para él, prioritarias, entre ellas una de Patrimonio.
«Voy a poner a Sevilla a funcionar, voy a gestionar la ciudad con eficacia para darle la vuelta y pondré en marcha mi proyecto llamado Sevilla, y lo haré de la mano de los sevillanos, que volverán a ser escuchados y atendidos».
En el eje que va desde la avenida de La Palmera hasta la barriada Elcano tienen el nuevo alcalde y su nueva Delegación de Patrimonio un banco de pruebas para demostrar a los sevillanos que los acuerdos del Pleno del Ayuntamiento, como el referido al Plan de Protección de la barriada vinculada a los astilleros, no son un mero papel mojado.
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Lo de siempre, la avaricia de la Gerencia de Urbanismo y la falta de comunicación con los barrios y sus vecinos, pasan como un rodillo, vulnerando y destrozando la calidad de vida de los vecinos y robándoles la luz, la brisa, etc, es decir, la sostenibilidad. Lo mismo que pretenden en el las Razas, con nuestro barrio, el verdadero Distrito Portuario de Sevilla, mientras el Alcalde de entonces, Antonio Muñoz, se vanagloriaba de que iba a crear un barrio nuevo, cuando únicamente iba a construir una muralla de edificios en línea delante nuestro.