Archivo de la etiqueta: Museo Arqueológico

Irrisoria

El portavoz del grupo municipal socialista y senador, Juan Espadas, ha tachado de “irrisoria” la cifra de 350.000 euros destinada en los Presupuestos Generales del Estado al museo Arqueológico de Sevilla y ha anunciado que el PSOE presentará una enmienda para que se eleve a 1,5 millones. Espadas, que visitó hace unos días el edificio diseñado por Aníbal González  en la Plaza de América como primigenio pabellón de las Artes de la Gran Exposición Iberoamericana de 1929,  describió un cuadro de su situación similar al de Santa Catalina: “riesgos evidentes de daños irreversibles y problemas no sólo de mantenimiento, sino también de seguridad”. Y, claro, no perdió la ocasión de atacar a Zoido: “No le he escuchado -dijo – ni una palabra sobre esto, pero sí sobre iglesias y otros lugares, y este museo se merece el mismo interés por parte del alcalde”. Hablando de intereses: cuando el Gobierno de Zapatero consignó para el Arqueológico en sus últimos años de mandato la aún más “irrisoria” cantidad de 317.000 euros, el que no dijo ni una palabra fue el propio Espadas.

 

El ‘Setarium’

‘Cultura desecha la ocurrencia de Monteseirín de exhibir el tesoro del Carambolo en las ‘setas’. El título no podía ser más exacto al incluir el término ‘ocurrencia’, porque no de otra manera podía calificarse el capricho del (ex) de mezclar churras con merinas arqueológicas para exhibir un tesoro tartésico (o fenicio) en un yacimiento romano, con la complicidad de su amoroso arqueólogo de cámara y a costa de cargarle a los sufridos contribuyentes sevillanos la compra de una urna anti-Fukushima con tal de convencer a Cultura y convertir así el ‘Antiquarium’ en el ‘Setarium’, al que todo le cabe. Ni a Paulino Plata ni a la ministra Sinde(scargas) les ha convencido el argumento marchenero de democratizar las vistas del Carambolo, cuyo destino seguirá siendo la caja fuerte en que lleva custodiado 50 años o el Museo Arqueológico, el único que es único y no un sucedáneo como el ‘Setarium’. Menos mal, porque de haber sido al revés, el (ex) se habría vanagloriado a perpetuidad de ser como el Cid y de ganar batallas después de muerto (políticamente, se entiende).