Colectivos ciudadanos amigos de los parques y jardines han denunciado la a su juicio sospechosa poda intensiva de las tipuanas que rodean el complejo comercial de la antigua estación ferroviaria de Plaza de Armas justo en vísperas de la inauguración de un nuevo supermercado de Mercadona, así como un recorte radical a diversas especies de plantas del Jardín Americano, con lo que se ha impedido su florecimiento.
Las podas de árboles vuelven a generar polémica en Sevilla, ya sea con Monteseirín, con Zoido o con Espadas como alcaldes y a pesar de las promesas de cada gobierno municipal de no repetir los errores de sus antecesores y de no tocar ningún árbol sin un consenso previo sobre la forma y fecha más apropiadas de proceder.
En esta ocasión, amigos de los parques y jardines han denunciado la intensiva poda de las frondosas tipuanas que daban sensación de formar un auténtico bosque rodeando el complejo comercial de Plaza de Armas y que a simple vista no entrañaban riesgo alguno para los transeúntes, como demostraría el hecho de que el Ayuntamiento no haya justificado previamente esta actuación basándose en este tipo de razones, como ha hecho anteriormente en otras zonas de la ciudad.
Según estos colectivos no parece casual que la poda masiva se haya realizado en vísperas de la apertura, prevista para hoy, de un nuevo supermercado de Mercadona, que de esta manera ya no pasa inadvertido detrás de las grandes copas de los árboles tras el fuerte aclarado al que han sido sometidos sin aparente necesidad.
Por otra parte, también han sido recortadas al máximo especies del Jardín Americano de la Expo-92 en vísperas del inicio del año en que se conmemora el XXV aniversario de la Muestra Universal, como ha sido el caso de las Megaskepasma, Brunfelsias, Durantas y Ruelias, con lo cual se ha impedido que algunas de estas plantas hayan florecido este año.
Según algunos expertos, las Brunfelsias nunca han debido ser podadas porque se estaban recuperando de un verano con temperaturas demasiado altas para ellas y, por otra parte, no se ha tenido en cuenta que las Megaskepasma podrían haber florecido sin problemas, al tiempo que no tiene sentido podar continuamente matas de flor como las Ruelias.
Al tratarse de especies subtropicales, siempre es mejor realizar la poda, en caso de necesidad, pasada la época de heladas, a principios de primavera, mientras que en la actual estación del año es el momento de cavar el suelo y aplicar materia orgánica. En algunas especies habría bastado con una poda de un tercio sólo para su rejuvenecimiento.
Enterado de lo ocurrido, el director general de Medio Ambiente del Ayuntamiento, Adolfo Fernández Palomares, ha pedido de inmediato un informe a los responsables del Jardín Americano sobre los criterios técnicos aplicados en las podas y solicitado a los expertos sevillanos más familiarizados con el manejo de esta clase de vegetación su asesoramiento, para evitar la comisión de nuevos errores y propiciar la recuperación del legado vegetal de la Exposición Universal.
El delegado de Medio Ambiente ha adelantado que se piensa en medidas como la inclusión del Jardín Americano en el estudio de seguridad que se está realizando en numerosos parques de la ciudad, más presencia policial los fines de semana en horario nocturno, que es cuando se detectan los actos vandálicos, y en especial cuando se celebran eventos en el Auditorio o el estadio ‘Olímpico’, y la organización de actividades para mantenerlo en actividad constante, no sólo a diario, sino también los fines de semana.
Por tanto, el nuevo gobierno local recibió esta zona verde totalmente renovada, y aunque tuvo que realizar una primera operación de desbroce y de poda de grandes árboles, la mayor parte de los daños que ahora sufre se han producido durante el actual mandato, por varios errores clave que Vílchez ha sabido diagnosticar con acierto. Por eso mismo se comprende menos aún la contumacia con que se ha perseverado en ellos hasta que la situación ha pasado a ser de dominio público: dejarlo sin actividad ciudadana y sin vigilancia policial.
