El alcalde anuncia la primera rebaja de impuestos en Sevilla durante la Democracia al reducir en un 13,4% el IBI para el año próximo tras haberlo subido previamente en un 10%, pero esa reducción no alcanza a las tasas y los precios públicos y, además, crea otras nuevas de las que no se ha informado a la opinión pública, como es el caso de un nuevo copago policial.
El Ayuntamiento ha incluido dos nuevos epígrafes en su propuesta para 2014 de la Ordenanza Fiscal reguladora de la Tasa por los Documentos que expida o de que entienda la Administración o las Autoridades Municipales a instancia de parte, sin que exista una Memoria de justificación económica para estas dos nuevas medidas más que la de esgrimir el tiempo y gasto empleados en la confección, gestión y tramitación de los documentos, como si ello no formara parte de la labor policial desde siempre y supusiera un acontecimiento extraordinario e imprevisto que hubiera que afrontar a partir de ahora.
Así, los sevillanos tendrán que pagar 5 euros por la expedición de certificaciones y acreditaciones de las actuaciones que haga la Policía Local para particulares, compañías de seguros, despachos de abogados…. sobre siniestros en bienes materiales (responsabilidad patrimonial) como caídas, lesiones, denuncias, obras, daños, inundaciones….
Seis veces más, en concreto 30 euros, costará a los implicados en un accidente de tráfico la expedición del típico informe/atestado de la Policía Municipal. Esta tasa también habrá que pagarla cuando la Policía intervenga en siniestros en bienes materiales ante casos de posible responsabilidad patrimonial.
Los contribuyentes sevillanos ya pagan con sus impuestos, a través del Ayuntamiento, cerca de 43 millones de euros en sueldos a la Policía Local para que haga sus labores habituales, amén de 6,5 millones de euros en complementos de productividad (en los que, por ejemplo, podrían englobarse las actividades citadas anteriormente para no aplicar nuevas cargas económicas a los ciudadanos), pero al Gobierno de Juan Ignacio Zoido no le basta con todo ese dinero y ha decidido inventarse estas dos nuevas tasas que, junto con la imposición de multas, contribuirán a deteriorar aún más la imagen de los policías a pie de calle.