En sus habituales recompensas periodísticas de fin de semana con los criterios de siempre para el reparto, a modo de premios y castigos, el Ayuntamiento del cambio ha filtrado dos noticias sobre proyectos de inminente (¿?) ejecución una vez sobrepasado el ecuador del mandato de Zoido. Una hacía referencia a la instalación de…. ¡lo han adivinado!, terrazas de veladores sobre la pasarela fluvial tendida al pie de la calle Betis, en la lámina del Guadalquivir. La imaginación, al poder. La otra, a la reconversión de la antigua estación de Cádiz en un centro deportivo con parking subterráneo y manteniendo allí el mercado provisional (ya sabemos qué significa esta palabra en Sevilla, cuasi eternidad) de la Puerta de la Carne. El pequeño detalle es que ambos proyectos datan del mandato anterior PSOE-IU, como el del mercado gourmet en las naves del Barranco, la segunda tienda de Ikea y tantos otros. Me pregunto cuándo Zoido va a empezar a cumplir realmente su programa, el que le llevó a la victoria electoral, en vez de rematar las obras que dejó pendiente Monteseirín.