He hallado unas declaraciones efectuadas tras la creación del Busway de Nantes
por Marc Delannoy y Camille Durand que demuestran la diferencia entre la ciudad francesa y Sevilla. Delannoy, que fue el responsable directo del Busway dentro de la Sociedad de Economía Mixta de Transportes en Común de la Aglomeración de Nantes (Semitan, popularmente conocida por la abreviatura Tan), se expresó en los siguientes términos: “Un tranvía habría sido una respuesta sobredimensionada, cuando entre 20.000 y 30.000 viajeros son diariamente transportados por la línea 4 (Busway)”.
Por su parte, Durand, vicepresidente primero de Nantes Métropole, añadió: “Harían falta al menos 50.000 pasajeros al día para que la rentabilidad de la inversión fuera aceptable a la hora de implantar un tranvía”.
Recuérdese que la razón de la creación de la línea de autobús de tránsito rápido (BTR) de 7 kilómetros de longitud, que en la práctica es el Busway, fue el rechazo al proyecto de una tranviaria de 4 kilómetros (la que iba a ser la 3 Sur) con un presupuesto de 135 millones de euros y con una previsión de 17.000 viajeros diarios.

En Nantes, como en gran parte de las urbes francesas, para poner en servicio una nueva línea primero hay que demostrar que se ha alcanzado o se va a alcanzar más pronto que tarde una demanda objetiva de viajeros. Si esa demanda no se produce no se autoriza una línea de transporte. Así ha ocurrido el pasado mes de febrero de 2020 con la línea allí denominada de Chronobus (intermedia entre la de un autobús normal y otra tipo BTR). Se abrió en 2013 y empezó transportando 9.000 pasajeros diarios, casi tantos como actualmente el tranvía de Sevilla (10.082). Hasta que al cabo de siete años no se han superado los 21.000 pasajeros no se ha convertido en la segunda tipo Busway de la ciudad del Loira. Éste es el concepto imperante, tal como expusieron Delannoy y Durand:
-Hasta que no se superan los 20.000 viajeros por día no se crea una línea de autobús de tránsito rápido o Busway. Esa cantidad significa un mínimo de 7,3 millones anuales.
-Hasta que no se llega a 50.000 viajeros/día no se autoriza un tranvía. Por tanto debe haber una demanda mínima de 18.250.000 usuarios al año (actualmente la del tranvía en Sevilla es de 3,68 millones).
¿Y por qué estos límites? Porque la inversión que exige líneas de estas características (plataformas reservadas, señalización, coste de los vehículos…) sólo se puede compensar cuando existe una altísima demanda que la haga viable.
EN SEVILLA
¿Y qué ha ocurrido y sigue ocurriendo en Sevilla? Pues que el pensamiento puramente político y electoralista de nuestros gobernantes, que no tienen en cuenta los costes de sus iniciativas para los contribuyentes, conduce a que primero se cree la línea, cueste lo que cueste, y luego se compruebe, si acaso se comprueba siquiera en una sociedad pasota como la nuestra, si se alcanzó la demanda que se iba a alcanzar; si es que se dijo algo al respecto o conforme a pretendidos estudios justificativos previos.
Monteseirín gastó 86 millones de euros en la línea del tranvía (pagando tres turnos de trabajo diarios para tratar de llegar a las elecciones al cabo de un año) desde la Plaza Nueva hasta el Prado de San Sebastián con la expectativa de una demanda de 15.000 viajeros/día (obsérvese que en Nantes los 17.000 previstos para la proyectada línea 3 Sur ya era una cifra inaceptable y que por eso optaron en su lugar por el Busway). El resultado real fueron entre 12.219 (año 2008) y 12.876 (año 2010). Consideraremos una media de 12.547 viajeros diarios. Pues bien, esta cifra se despacharía en Nantes con una línea de autobús reforzada.

Monteseirín había errado en su cálculo en un 16%, razón de más para haberse quedado quieto y no emprender nuevas aventuras. Pero eso habría sido desconocer al personaje, tan pródigo a la hora de gastar el dinero de los sevillanos con tal de pasar a la historia como el “gran modernizador” de la ciudad, y el que venga detrás que arree. El entonces alcalde invocó un estudio de Tussam (¿?) según el cual si se prolongaba la línea tan sólo 895 metros, hasta la estación de San Bernardo, se podrían alcanzar 6,7 millones de viajeros/año, a una media de 18.356 cada día. Total, si sólo había que gastarse entre 10 y 13 millones de euros más (siempre según la versión oficial).
Se gastó el dinero y aunque se produjo un repunte durante el primer año de la ampliación (2011) y se llegó a los 4,77 millones de pasajeros/año y 13.068 diarios de media, no alcanzó esta vez tampoco el objetivo que se había marcado. Ni entonces ni en los ocho años transcurridos desde entonces, porque progresivamente la demanda del tranvía sevillano ha caído hasta los 3,68 millones anuales en 2019, a un promedio de 10.082/día. Con este dato, en Nantes ya se habría cubierto la demanda con un mero autobús convencional.

Y vamos a comprobar, de nuevo, la diferencia entre Nantes y Sevilla comparando la evolución en paralelo del ‘Metrocentro’ sevillano y del Busway nantés para los cuatro años, suficientes por representativos, en que he podido conseguir datos completos de la ciudad ribereña del Loira.

En un decenio en números redondos, mientras que el Metrocentro ha perdido casi 800.000 viajeros (un 17,5%), el Busway de Nantes ha ganado 4,5 millones (+85%).
Sólo cuando las autoridades nantesas comprobaron que el Busway iba camino de los 30.000 viajeros diarios de media decidieron la inversión no en un tranvía, sino en un Busway eléctrico, con prestaciones equivalentes a las de aquél. Cuando la demanda, tal como dijo Camille Durand, llegue a los 50.000/día entonces y sólo entonces estaría justificada la inversión en un tranvía, nunca antes.
HUIDA HACIA ADELANTE
En contraste, mientras que la demanda del tranvía se reducía año tras año en Sevilla y lo prudente habría sido tratar de recuperarla antes de gastar de nuevo el dinero del contribuyente en el invento de Monteseirín, su sucesor y correligionario Espadas llevaba desde su primer mandato hablando de la ¿necesidad? de prolongar la línea de forma redundante en superficie por el mismo trazado por el que, soterrado, discurre ya el Cercanías de Renfe, desde San Bernardo hasta Santa Justa, a ver si a base de más dinero (49 millones de euros) y quitando del medio todas las líneas de autobuses “coincidentes” que estorban es posible canalizar a todos los usuarios posibles al tranvía para que éste alcance los 7,5 millones/año que ha calculado la consultora Ayesa.
Esa previsión equivaldría a 20.548 viajeros/día. En Nantes, ese objetivo que, recordemos, es una mera hipótesis (como la fallida con la que se trató de justificar la ampliación de Monteseirín hasta San Bernardo) y no una realidad, sólo daría para justificar un Busway de primera generación, el de gas natural comprimido, ni siquiera el eléctrico. Esa estimación de Ayesa que esgrime Espadas no llega ni a los 21.000 usuarios diarios del Chronobús de la línea 5 antes de su conversión en el segundo Busway de la ciudad del Loira.

Es palpable, pues, la diferencia en el modo de actuar de Nantes y Sevilla y de utilizar el dinero del contribuyente: la primera, en términos de rentabilidad económica; la segunda, en términos de rentabilidad política y electoral. En la ciudad francesa no se plantean un tranvía hasta que la demanda no sea o al menos se acerque a los 50.000 pasajeros/día; en la ciudad andaluza (sólo con una mera estimación de la consultora que en la misma página dice que merced a la ampliación del tranvía se va a reducir el tráfico privado en un 5% y luego le salen en el balance 2.000 coches más que antes; patético) nos vamos a acabar gastando entre 145 y 148 millones de euros (se incluyen los 49 millones estimados hasta Santa Justa) para tratar de lograr ¡el 41% de la demanda esperada para el Busway eléctrico de Nantes!, que ha costado sólo 54,5 millones.

Pero a base de insistencia y de seguir dilapidando dinero (sobre todo de la Unión Europea a través de los fondos Feder), cuando se gasten del orden de 200 millones en darle la vuelta al Casco Antiguo con un tranvía y se quiten del medio una serie de baratas líneas de autobús de Tussam para obligar así a la gente a subirse en aquél, es probable que Sevilla se acerque o logre por fin los mismos números que el BTR de Nantes, pero para entonces la ciudad francesa quizás tenga ya media docena de líneas de tranvía y otras tantas de Busway.
Primer Gobierno formado por Susana tras su elección como presidenta. Aunque con la edad cada vez me han ido repateando más los localismos y todo eso de las cuotas territoriales en la Andalucía universal de Juan Ramón, contaminado por el ambiente no me resisto al morbo de escudriñar la cuna o la adscripción geopolítica de los ministrillos andaluces. Como cantaba Jeannette, el mundo me ha hecho así. Veamos. Son sevillanos, con permiso de Triana, la propia presidenta y María Jesús Montero, y pasa por asimilado a Sevilla Emilio Llera. Malagueños o asimilados a la circunscripción costasoleña son José Sánchez Maldonado, María José Sánchez Rubio, Rafael Rodríguez y Luciano Alonso. Resultado: Sevilla, 3 – Málaga, 4. ¿Agravio comparativo? ¡Qué va, todo lo contrario! ¡Es cojonudo! Después de treinta y tantos años soportando la leyenda negra del centralismo sevillano ya podremos, ¡por fin!, empezar a hablar a partir de ahora del centralismo malagueño desde la Junta contra o sobre el resto de Andalucía. Pero ¡qué lista eres (sin doble sentido, ¿eh?, que os conozco), Susana!
Por edades, el segmento más golpeado por el desempleo es el comprendido entre los 45 y 49 años, con 12.370 personas en desempleo, seguido de los que tienen entre 35 y 39 años, con 11.998 parados. El grueso del paro en la ciudad se concentra en las personas maduras y mayores, desde los 30 hasta los 54 años, ya que en todas esas franjas las cifras de paro superan los cinco dígitos.
El desglose de parados por su nivel educativo es el siguiente en Sevilla capital: analfabetos, 683; educación primaria, 12.625; FP sin titulación, 511; primera etapa de Secundaria, 44.462; FP con titulación en la primera etapa, 67; segunda etapa de Secundaria, 14.194; FP con titulación, segunda etapa, 67; FP superior, 5.029; otras enseñanzas con Bachillerato, 51; enseñanza universitaria, 10.564; con especialización profesional, 121; enseñanza universitaria de tercer ciclo, 103; sin asignar, 410.
La Agricultura es el único sector donde en junio ha crecido el paro en la provincia de Sevilla, con 566 personas más inscritas en las oficinas del Servicio de Empleo, como consecuencia sobre todo del final de la campaña de la recogida del melocotón. Es probable que no haya una recuperación hasta el inicio de la campaña de la aceituna del verdeo. En el resto de sectores, baja el paro en Industria (172 personas), Construcción (207), Servicios (808) y Sin empleo anterior (184).
Un mes antes del pleno ejercicio de su responsabilidad como arzobispo de Sevilla (noviembre de 2009), para lo que hubo de esperar a la renuncia efectiva del cardenal Amigo Vallejo, y siendo aún administrador apostólico de la diócesis de su procedencia (la de Córdoba), el actual prelado de los sevillanos tuvo la oportunidad de comentar un estudio realizado por Analistas Económicos de Andalucía -perteneciente a Unicaja- en que se llegaba a la conclusión de que el impacto de la Semana Santa en la capital de la mezquita era de 42 millones de euros y que contribuía a generar o mantener el equivalente a 1.682 puestos de trabajo.
En el año 2005, un equipo de trabajo de la Universidad Hispalense compuesto por Luis y María Luisa Palma Martos, Antonio García Sánchez y Gloria Franco Casillas realizó una propuesta metodológica para la evaluación del impacto económico de las fiestas de primavera en la ciudad de Sevilla, cuya última cuantificación se produjo, si no recordamos mal, en el año 2010.
Estos datos demuestran que Sevilla ha sabido rentabilizar, en mayor proporción que el que teóricamente le correspondería por su peso demográfico, la Semana Santa en comparación con el resto de Andalucía y aun de España. Y es que, según el estudio universitario citado, la conmemoración de la Pasión de Cristo que se organiza en nuestra ciudad llega a congregar 909.000 personas, de las que 215.000 vienen de fuera de la capital y de su área metropolitana.
Pese a que el delegado de Fiestas Mayores, Gregorio Serrano, declaró en la emisora de radio de la Conferencia Episcopal Española que todo estaba listo para la Semana Santa de este 2013 con un despliegue en los servicios de varios millares de personas, porque según dijo existe una larga experiencia en su organización, la Asociación de Hosteleros montó en cólera contra el Consistorio al conocer a última hora del Viernes de Dolores la orden de que debía retirar el Domingo de Ramos los veladores de las calles a partir de las 13 horas, con el fin de dejar expedito el terreno ante el paso de las cofradías y una posible evacuación en caso de emergencia, y el resto de la Semana Santa a partir de las 16 horas.
Al final ha tenido que ser el alcalde, tan solícito siempre a las demandas de comerciantes, hoteleros y hosteleros, quien le ha enmendado la plana a su equipo para mantener el ‘statu quo’ en los horarios de los veladores, a fin de que propietarios de algunos establecimientos no perdieran, según las estimaciones de la patronal, hasta el 80% de los ingresos previstos en estas fechas de Semana Santa, la temporada alta para el sector y que aporta el 1,22% del producto Interior Bruto de Sevilla capital.
Y aunque Bendodo pudiera tener razón, hace tan sólo tres meses coincidía plenamente con Sanz, ya que cuando en una entrevista en este mismo medio le preguntaban si creía que había ya candidato para las autonómicas, afirmaba: “Es pronto para hablar de eso. El mismo Zoido lo ha dicho. Toca reforzar el partido y marcar las estrategias de ganar para gobernar. Además, la prioridad es 2015, donde queremos seguir siendo la principal fuerza política con ese carácter municipalista”.
En el año 2009, último del que conozco datos aplicables a esta manida y superficial cuestión, la Cámara de Comercio hispalense realizó un informe sobre la posición relativa de Sevilla respecto al resto de provincias andaluzas, en el que de la comparación general entre las ocho puede deducirse otra bilateral entre Sevilla y Málaga. Este estudio se basó en datos del Instituto Nacional de Estadística para cerca de una veintena de indicadores, que vamos a enumerar con, a continuación, la posición de Sevilla en comparación con el resto de provincias, Málaga incluida:
El estudio no deja de reconocer el comportamiento “muy dinámico”, similar o incluso superior al de Sevilla en algunas variables de la economía malagueña, pero en el conjunto general el peso económico de Sevilla sigue siendo superior al de Málaga y Sevilla aúna, por tanto, la doble condición de capital política y capital económica de Andalucía.
La Plataforma pro Parque Guadaira (a mí me gusta sin acento en la ‘i’, pese a Gutiérrez Limones), ya saben, el único parque del mundo proyectado desde su origen con una carretera por medio, ha pedido públicamente su cerramiento ante el riesgo de que sea “fagocitado” por los coches de los aficionados que acuden a los partidos del Betis. Miedo más que justificado. El sábado pasé por allí coincidiendo con el encuentro ante el Español y los automovilistas aparcaban incluso sobre el campo de fútbol del complejo deportivo municipal de la calle Ifni, sin que la invisible Policía se inmutara ni a Zoido se le ocurriera mandar la grúa, no vaya a ser que se le cabreen los votantes. Larga bula a los dos clubes sevillanos. Los gorrillas, que ahora están al aguardo de sus víctimas montados en bicicleta para que nadie se libre de pagarles el ‘impuesto revolucionario’, ya se frotan las manos ante la perspectiva que les ofrece el nuevo espacio explanado entre el Polígono Sur y Heliópolis. Mucho me temo que el Guadaira, más que parque va a ser el parking anexo al estadio del Betis.
El itinerario de la marcha estuvo rodeado de un fuerte despliegue policial. Narraban los colegas que en cada negocio susceptible de ser asaltado por los manifestantes (sucursales bancarias, Cámara de Comercio, supermercados, hoteles, tiendas de telefonía…) se hallaban apostados al menos dos agentes de la Policía.
Samaranch); mantuvo vivo el ‘Anillo Olímpico’ de Montjuich, donde este año ha organizado el Mundial de Atletismo Junior y en 2013 albergará el Mundial de Natación, y, previamente, el Campeonato de Europa (2010) y el Campeonato del Mundo Indoor (1995), y donde las instalaciones, como el Palau Sant Jordi, albergan hasta congresos médicos, en contraste con nuestro Palacio de San Pablo; cada año la ciudad organiza además cerca de 350 eventos deportivos (¡casi uno diario!), con unos 250.000 participantes de media.
Desde que en 2002 se celebró el Año Internacional de Gaudí y se abrió al público la fabulosa Casa Batlló en el Paseo de Gracia, la fiebre por conocer la obra del genial arquitecto de Reus aumenta cada año. Las colas para entrar en la Sagrada Familia son tan multitudinarias (dos horas de espera) como las de Versalles y la Capilla Sixtina: 3,2 millones de visitas/año. No en vano la Cámara de Comercio de Monza le atribuye en un estudio un valor de marca de 90.366 millones de euros, más aún que al museo del Prado (59.262 millones).
Como según el Charles Bronson municipal, Demetrio Cabello, el Ayuntamiento no tiene afán recaudatorio, en el intervalo de los tres minutos que median entre una multa de tráfico y otra se ha inventado la ‘tasa de acompañamiento’, otro ‘feliz’ hallazgo de la verborrea tecnocrática. El nuevo sablazo municipal se aplica a todo colectivo que ocupe la vía pública en actitud reivindicativa o lúdica (como si no existiera el constitucional derecho de manifestación y reunión) y que, en opinión del Gran Hermano que nos vigila desde la Plaza Nueva, precise de escolta policial, no se vaya a desmandar. Por cada hora de un guindilla siguiendo a quien no se lo ha pedido y que además le ha pagado el sueldo previamente con sus impuestos, ¡zas!, 35 euros de mordida municipal. A la marcha ciclista del domingo le quisieron clavar 3.000 euros, más que lo que valían las bicicletas, y previamente intentaron aplicarle la tasa sin tasa hasta a los patinadores y los domingueros del Parque del Alamillo. Y, mientras, Zoido, incapaz de cobrarle las deudas tributarias al Sevilla y al Betis.