Los proyectos de las líneas 2,3 y 4 del Metro se resumen así: la Junta ha tenido opciones para que de sus 41,7 kilómetros sólo 2,01 discurran en superficie (el 4,82%). Sin embargo, y salvo en una opción en que la diferencia es nimia, se ha decantado por trazados que obligan a construir 8,9 kilómetros en superficie (el 21,34%) y 32,8 kilómetros soterrados (el 78,66%). El Metro circulará a ras de suelo en uno de cada cinco kilómetros o, lo que es lo mismo, en la quinta parte de su trayecto será como un tranvía.
De esos 32,8 kilómetros soterrados, sólo construirá con tuneladora 6,13 (el 14,71% del total) y obligada, por las características del casco antiguo, a perforar a 40/50 metros de profundidad. La diferencia entre usar tuneladora o muros-pantalla es de 7 millones de euros por kilómetro (25,8 millones frente a 18,6), por lo que se ahorra 186,69. Segunda conclusión: elige la técnica más barata, no la mejor ni la más rápida.
SEVILLA VERSUS MADRID
¿A costa de quién se hace ese ahorro? De los sevillanos, porque con los muros-pantalla hasta 15 metros de profundidad habrá que cortar calles durante meses y meses, y ya se estima que la Ronda podría estar levantada al menos tres años. En Sevilla se usará una técnica del siglo XIX para un Metro del siglo XXI que debió haberse iniciado hace 7 lustros. El retraso no va a servir para que la ciudad se beneficie de las últimas tecnologías.
En Madrid, el muro-pantalla es excepción y no regla. La prolongación de la línea 11 al barrio de La Fortuna (Leganés) se ha hecho con la tuneladora ‘Excavolina’, que ha perforado 3,1 Kms. a entre -15 y -23 metros. Segundo ejemplo: el 26 de abril se inició la conexión subterránea entre los AVE de Chamartín y Atocha, que discurre ¡por debajo de las líneas de Metro existentes!, a -48 metros. El túnel tendrá unos 7 kilómetros y un coste de 206 millones de euros, a razón de 29,4 millones/Km.
Como la tuneladora perfora 500 metros/mes, contando con sus revisiones el túnel estará listo a finales de 2010/principios de 2011. En Sevilla el tiempo y las molestias no valen nada y se puede poner patas arriba casi 27 kilómetros de calles durante años con tal de ahorrarse la máquina. Por contra, en Madrid han trabajado simultáneamente diez tuneladoras para la mayor ampliación del Metro en su historia.
MAS ENGAÑOS EN LA ENCARNACIÓN
El Ayuntamiento ocultó en 2007 la inviabilidad técnica y el sobrecoste multimillonario del Metropol Parasol, vulgo ‘setas’. Ahora, el Metro ha servido para dejarlo en evidencia otra vez. La Junta ha descartado ubicar en la Encarnación la única estación proyectada en el casco antiguo porque no cabe allí, salvo que se demuelan las ‘setas’, ante lo cual ha optado por la plaza del Duque, donde tendrá que construirla a -50 metros y ocupándola durante cinco años (recuérdese cómo media Plaza Nueva quedó inutilizada por las obras de los 80).
Así pues, el Ayuntamiento no reservó en la Encarnación el suelo para la estación del Metro, aunque durante este tiempo lo ha ocultado y alimentado la creencia de que junto al Parasol iba a haber un gran intercambiador de todos los sistemas de transporte. Los detalles de esa futurible estación figuraron incluso en la Wikipedia hasta que fueron eliminados, pero navegando por Internet aún se pueden encontrar amplias referencias. Por ejemplo, en las bases y respuestas del concurso internacional de ideas ‘Encarnación de Sevilla’ (www.sevilla.org/encarnacion/esp/bases/bases.html;
www.sevilla.org/encarnacion/esp/consultas/consultas.html; y www.sevilla.org/encarnacion/esp/actualidad/contenido.asp ).
Hay incluso una crónica de la primera visita de Monteseirín a las obras “que marcarán –se dice- un antes y un después en la historia de la ciudad”, y puede leerse: “Se incluirá la línea 2 del Metro y la parada de la línea T2 del Tranvía”. Pues al final, ni uno ni otro.
UNA SOLA ESTACIÓN
Zoido considera “insuficiente” una estación en el casco antiguo más extenso de Europa y aboga por que además de en Plaza del Duque se construya otra en la de Cristo de Burgos. Aprocom recuerda que “después de decirnos que no se podía utilizar el trazado de Plaza Nueva, existente desde hace 30 años, por ser muy profundo ahora se está hablando de una estación a -50 metros”, y pide además de ésta otras en la Magdalena y en la Encarnación.
Parece obvio que una sola estación es insuficiente, salvo para Monteseirín, que aplaude la propuesta porque “a día de hoy, es una estupidez soberana decir que el Metro se utilice para moverse por el centro” y que, como si no se hubiera enterado del descarte de la Encarnación por causa del Parasol, da como alternativa al Duque la Encarnación misma o Ponce de León .
Volvamos al espejo de Madrid, donde alrededor de la Puerta del Sol (equivalente a nuestra Plaza Nueva) hay estaciones tan cercanas como Opera, Callao, Gran Vía, Plaza de España, Sevilla, Banco de España, Retiro y hasta cuatro para llegar a Atocha. ¿Son acaso estúpidos los madrileños?
Si, tal como preconiza Monteseirín, la única estación se construye en Ponce de León porque es estúpido usar el Metro para moverse por el Centro, el usuario que allí se bajara debería recorrer 500 metros para llegar a la Encarnación; 750 hasta el Duque y 1.125 metros hasta Plaza Nueva cortando por El Salvador.
Más estúpido parece entonces haber gastado 80 millones de euros en un tranvía para salvar tan sólo los 670 metros que separan la Puerta de Jerez -con estación de Metro- de la Plaza Nueva.